Ante el fuertísimo shock que provocó la repentina muerte de Romina Yan, los familiares decidieron no realizar velatorio y despiden sus restos directamente en un cementerio de zona norte de Buenos Aires en una ceremonia absolutamente íntima.
Hoy a las 19hs en el obelisco, sus fans se reunirán para despedir a Romina llevando una rosa blanca. Si podes SUMATE por esta bella actriz logró brillar con su luz propia.
su trayectoria por "Casi Ángeles"


OFF´S DE ROMINA EN CASI ANGELES
“El Destiempo”
Todo llega dicen, y es verdad, el problema no es si llega sino cuando llega. A veces las cosas llegan cuando ya es tarde. Otras veces lo que esperas llega antes, cuando no estás listo. Todo tiene su momento, antes o después de ese momento nada prospera.
El destiempo son dos calles que nunca se cruzan. El destiempo es llegar cuando la fiesta terminó. El destiempo no es solo que algo te llegue tarde, es también llegar tarde a eso. Es no tocar a tiempo la nota justa. El destiempo es perder el tren. El destiempo es un perdón que llega tarde. El destiempo es como una fruta verde, amarga.
Cinco segundos antes puede ser el momento ideal, cinco segundos después el peor momento. El destiempo es un desencuentro. Es sabiduría que llega cuando ya no la necesitas. El destiempo es una tarde fría en verano. Es lo opuesto al lugar y la hora indicada. El destiempo es una discusión entre sordos.
El destiempo es una ironía.
“En busca del tiempo perdido”
Una imagen, un olor, un sonido, nos traen una vivencia que sigue viva, latiendo. Va más allá de que uno quiera o no, ese recuerdo vuelve sin permiso, sin ser llamado.
¿Por qué algo que queremos sepultar, olvidar, se nos cuela por los sentidos y vuelve tan vivo como siempre? Porque algo nos dice, algo nos reclama. Algo late en esa imagen, en ese aroma, en esa música, algo nos susurra, es un tiempo perdido que vuelve para ser recuperado.
Esas evocaciones, esos recuerdos súbitos son señales que nos sirven de guía, porque cuando escuchás una canción que te hace acordar a otra época y sentís nostalgia, quiere decir que algo de lo que vos eras quiere volver, quiere seguir vivo.
Casi todos los días tenemos esas imágenes, esos olores, esos sonidos que nos transportan al pasado, pero los ignoramos. Pero si en lugar de ignorarlos nos detuviéramos a entender el mensaje que nos traen, entenderíamos mucho mas de nosotros. Y de a poco, tirando de esa punta del ovillo, guiados por ese recuerdo, llegamos a la otra punta, a esa palabra que siempre estuvo ahí y que vuelve, irrumpe, ni golpea la puerta, nos viene a reclamar porque quiere ser dicha.
Es un tiempo perdido que entra por los sentidos, que irrumpe de golpe, pasado que se hace presente porque no puede esperar más.
Un tiempo perdido que quiere renacer. Un tiempo perdido que quiere ser rencontrado. Porque cuando recobramos ese tiempo perdido algo renace en nosotros y volvemos a sentirnos vivos, volvemos a ser nosotros mismos. Recuperando el tiempo perdido nos reinventamos una y otra vez.
Cuando algo se nos hace presente una y otra vez señala algo simple, nunca se fue. Porque en nuestro corazón limón no es limón, limón es hija. Una canción no es canción, es deseo de amar. Pasado no es pasado, es tiempo perdido que quiere ser recobrado.
“Mientras Todos Lloramos”
Hasta que conocí a mi hija mi vida era solo lo que yo quería, lo que yo necesitaba, yo antes que nadie y sin importarme nadie.
Dicen que los que menos tienen son los más solidarios ¿será porque comprenden en carne propia el dolor del otro?
Solidaridad, tal vez sea comprender que no hay felicidad de uno si no hay felicidad de todos. Cuando sos madre no hay felicidad posible para vos si no podes darle una vida feliz a tu hijo.
No podes ser feliz si el ser que amas no es feliz. Pero la verdadera solidaridad es cuando extendes tu amor, cuando el otro, por el solo hecho de ser un ser humano, te importa.
Ser solidario es arriesgarse por el otro, con determinación, sin dudarlo, es jugarse. Uno es solidario cuando siente el profundo deber de cuidar al resto como si fueran sus hijos. La solidaridad aparece cuando entendemos que todos somos lo mismo, somos uno.
Ponerte en el lugar del otro. Amar al otro como si fueras vos mismo. Que tu vida valga por el valor que le das a la vida de los demás.
Conocí el mundo, sus lugares más exóticos. Viajé por tierra, por aire, por mar, fui lo que quise ser, y confieso que mientras todos estaban llorando yo estaba de fiesta, y después maldije que muchos estuvieran de fiesta mientras yo lloraba la perdida de mi hija.
Ahora sé que ya no hay fiesta para mi mientras otros lloran, ahora por fin encontré una buena razón para morir.